The Recordings by Julius Subak (1908) and Max A. Luria (1927)
Colección de CD/DVD – Publicada en 2009 en la serie Documentos sonoros y fonográficos de la Academia de Ciencias de Austria
Esta colección de CD/DVD, que incluye un folleto bien documentado, consta de grabaciones históricas judeoespañolas de los Balcanes. Publicada en 2009 en la serie Documentos sonoros y fonográficos de la Academia de Ciencias de Austria – Colección Histórica completa de los años 1899 – 1950, lo editó Christian Liebl
Se compone por un lado de 15 grabaciones realizadas, en 1908/1909, por Julius Subak profesor e investigador austriaco ; y, por otro lado, de 26 otras grabaciones recogidas, en 1927, por el estadounidense Max A. Luria. Cabe señalar que el objetivo de estas grabaciones es ante todo etnomusicológico, mucho más que artístico.
En 1908/1909, se contrató a Julius Subak (1872-1936), profesor e investigador, experto en idiomas romances, por la Comisión de los Balcanes de la Academia imperial de las ciencias para efectuar grabaciones sobre el judeoespañol hablado en los Balcanes. Así que recogió el equivalente de 15 fonogramas, que iban a constituir las primeras grabaciones de judeoespañol (o ladino) realizadas con fines de investigación científica. Estas grabaciones incluyendo especialmente las de los representantes más importantes de la comunidad sefardí de Sarajevo – como Abraham A. Cappon, se componen principalmente de poemas y romances (baladas transmitidas de manera original desde la España medieval).
En 1927, el estadounidense Max A. Luria (1891-1966) empezó investigaciones lingüísticas en Monastir (actualmente Bitola, República de Macedonia del Norte) en el marco de su tesis doctoral. Realizó en total 26 otras grabaciones compuestas por proverbios y diálogos, pero sobre todo de numerosos konsežas (cuentos folclóricos), que reactivan esta lengua judeoespañola particularmente conservadora y llena de autenticidad.
Las contribuciones de Aldina Quintana Rodríguez, Edwin Seroussi y Rivka Havassy y también Paloma Díaz-Mas subrayan la importancia de estos documentos sonoros únicos, en particular para la lengua judeoespañola, pero también para el estudio de la música y de la literatura sefardíes. Acompañadas por transcripciones, constituyen un complemento precioso de los testimonios sonoros de una cultura anteriormente próspera en peligro de extinción.