Por Jean-Sébastien Noël
En los siglos XIX y XX, las poblaciones judías europeas se vieron muy afectadas por los cambios políticos y económicos, por la violencia de los pogromos y, por supuesto, por el cataclismo genocida, por las migraciones transatlánticas y por la adaptación a nuevos marcos sociales, lejos de poder reducirse únicamente a las normas religiosas. Marcadas por las diversas formas de la modernidad (ideológica, intelectual, artística, técnica), estas comunidades se enfrentaron a una crisis de su sentido de pertenencia. En un contexto de profunda agitación -y a menudo de desaparición- de la sociabilidad judía tradicional en Europa Central y Oriental, la cuestión de los criterios que sustentan lo que el musicólogo Amnon Shiloah (1928-2014) llamaba un “techo común” puede considerarse a través de todos los matices del duelo y la expresión de temas funerarios y conmemorativos.
Las trayectorias de los músicos emigrantes (compositores en particular) y la circulación de sus producciones permiten redefinir una territorialidad transatlántica del duelo asquenazí. En el marco de una “historia social de lo cultural”, este libro se propone comprender la evolución de los marcos rituales y de las redes sociales en las que operan los compositores, así como las condiciones y las limitaciones materiales específicas del trabajo de escribir música sobre temas funerarios. Mediante el análisis de repertorios tanto eruditos (litúrgicos y profanos) como populares (canciones folclóricas, arias de teatro yiddish de la Segunda Avenida, así como canciones de los guetos y de los campos), este estudio abarca un periodo de tiempo relativamente largo (desde la década de 1880 hasta la de 1980) en un intento de comprender -a pesar de la pluralidad de voces y de la impermanencia de las estructuras sociales- el modo en que la música siguió permitiendo que los muertos descansaran y que los que habían (sobre)vivido volvieran a la vida.
Más información y pedir el libro