Jeremy Montagu
Scarecrow Press, inc. USA, 2002, 192 p.
Escrito en memoria de la musicóloga israelí Bathja Bayer (1928-1995), que realizó una gran labor en el campo de la arqueología musical, este libro de Jeremy Montagu enumera las menciones de instrumentos musicales en cada libro de la Biblia y del Nuevo Testamento, con numerosas ilustraciones.
Para todos los que hayan leído la Biblia y se hayan preguntado cómo eran realmente el arpa de David o el sacabuche y la corneta de Nabucodonosor, Jeremy Montagu, conservador jubilado de la Colección Bate de Instrumentos Históricos de Oxford, ha investigado y ofrecido una explicación sorprendentemente exhaustiva de los instrumentos musicales que adornan las páginas del libro más sagrado de la civilización occidental. Se trata de un estudio detallado de todos los instrumentos musicales mencionados en la Biblia, utilizando los recursos de la lingüística, la organología y la etnomusicología para identificarlos y describirlos. Se anotan todas las referencias a un instrumento y se corrigen todos los errores de traducción. La Biblia, tal como la conocemos en español, es una traducción, y la historia de las traducciones bíblicas al arameo, griego, latín y otras lenguas es cuestión de conjeturas. La sustitución de los instrumentos musicales de la época del traductor por los del autor original es tan común como descuidada. Jubal no tenía órgano, ni David tenía arpa. Este libro utiliza todos los recursos disponibles para establecer qué era realmente cada instrumento, cómo sonaba y cómo se tocaba.